Una Noche en África
La princesa Cristiana estaba triste. Desde que cruzó su mirada con aquel joven de la caravana que atravesaba el desierto en el oasis, su pensamiento no era otro que rogar a su dios que algo pasara y truncara ese destino que le tenían preparado.
No se si fueron sus oraciones o ese caprichoso destino que siempre parece estar jugando, pero aquella tarde cuando la caravana procedía a detenerse para montar el campamento, aparecieron medio centenar de jinetes armados en ágiles corceles que los rodearon antes de que casi pudieran darse cuenta.
De entre todos ellos surgió uno cuya cabalgadura destacaba entre todas las demás. El caballo perfectamente domado parecía uno solo con su jinete.
Se detuvo delante de la princesa, se inclinó y cogiéndole de la mano con su fuerte brazo, la subío a la grupa. Un ligero movimiento y su montura inició el galope hacia el sol poniente. Detrás todos sus hombres se dispersaron.
Nunca más se supo qué fue de la princesa...
5 Comments:
anda majo, corrige esto: "cabalgadrura"
A no ser que me haya equivocado de palabro...
PS: desde que te plagian escribes mas >;-D !!!!!!
No hay que ponerse así porque no se ponga "dura" a la primera... :-pppp
ACABO DE DESCUBRIRTE, UN PLACER.
¿Por qué escribes con mayúsculas?
Te leo mejor si no ALZAS la voz. :)
Esa princesa cabalgando me suena.... de que sera????jejejejejeje
Bonito cuento.... de hadas....
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